top of page

Reglas Internas para la tercia de Puerto Rico

Las reglas internas son aquellas que se redactan especialmente para un país en particular, dichas reglas no son las reglas oficiales de la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo, pero sí tienen que ver con la realidad del país donde se encuentra. Las reglas internas varían por país, por lo que las mismas no tienen que ser iguales a las internas de España, Venezuela, etc.

La reglas internas para la tercia de Puerto Rico seguirán un estricto rigor ya que debemos guardar por la pureza de la Orden para que sea siempre Católica y Apostólica.

Como bien sabemos, la secularización de Puerto Rico es enorme, la masonería ha diseñado el sistema donde vivimos y las bases sociales giran en torno al liberalismo, el sincretismo y el relativismo, los cuales están bien enraizados en la sociedad moderna. Como esto constituye un reto enorme, se preparan estas reglas internas para luchar contra esa maquinaria que busca, además de secularizar, descristianizar a todo Puerto Rico.

Todo caballero y dama, deberán regirse por las mismas y estar atentos a cumplirlas siempre ya que en cierta manera estas están relacionadas a las reglas oficiales de la Orden Internacional.

Los puntos leen como siguen:

  • Todo candidato al entrar a la orden deberá mostrar certificado de buena conducta, certificado de bautismo, primera comunión y de confirmación y si está casado el certificado de matrimonio.

  • No podrá estar divorciado y vuelto a enamorar o a casar.

  • Ante la enorme secularización que sufre Puerto Rico, es deber de todo Caballero, ser ejemplo vivo de la fe cristiano-católica.

  • Matendrá una vida llena de oración y contemplación en la vida privada y mostrarán una vida llena de humildad.

  • Asistirá todas las veces que sea necesario a la sagrada misa, como mínimo, martes, jueves y domingos.

  • Siempre estarán dispuestos a ayudar en sus respectivas parroquias y aprovecharán en todo caso a ofrecer al menos una hora de adoración al santísimo, principalmente los jueves.

  • Serán defensores arduos de la fe, de la Iglesia y de sus sacerdotes, monjes y monjas.

  • Velarán siempre porque se cumplan las reglas de pulcritud en los templos, en todos los aspectos.

  • Serán ejemplo y motivo de inspiración para nuestros jóvenes, hombres y mujeres.

  • Siempre rezarán el rosario solos y/o en familia para pedir por los hermanos católicos perseguidos, por los huérfanos y viudas, por las personas que viven en miseria, por la paz mundial, por nuestro papa, por la unión familiar, por la Orden, etc.

  • Siempre identificarán aquellas personas de la comunidad que necesiten para comenzar a realizar coordinaciones para que dichos hermanos en necesidad reciban la atención y la ayuda necesaria para que tengan una vida digna.

  • Se realizarán actividades nobles para poder dirigir dichos esfuerzos a las personas necesitadas.

  • No somos filantrópicos, por lo que toda ayuda que se brinde a los hermanos necesitados será con completa discreción y sin llamar la atención todo lo más posible que se pueda, de esa forma cumplimos con el dicho enseñado por Cristo mismo: "Que tu mano izquierda no sepa lo que hace tu mano derecha".

  • Ningún caballero o dama tendrá nexos políticos ni participará de ese tipo de actividad ya que la política es un medio de manipulación y la orden no es para ser usada para tales fines ni intereses. De esa forma se mantiene lejos el pecado de codicia y soberbia.

  • Denunciarán enérgicamente toda corrupción y conductas inadecuadas y que vayan contra la vida misma y contra la familia. Serán defensores de la vida, defensores de la familia, defensores de los valores cristianos en una sociedad secularizada.

  • Llevará el uniforme con humildad, sin llamar la atención y sin presumir de su naturaleza de templario. Siempre en actitud de oración y una fuerte fe.

  • Colaborará en las actividades donde se les solicite su ayuda, sin pretender querer asumir la dirección, sino en modo de humildad.

  • Como se pueden esperar ataques por parte de la masonería hacia la orden, deberán estar atentos y preparados para lo que sea, desde intentos de boicotear actividades, intentar dañar la imagen de la orden con difamaciones, cartas enviadas al obispado con perjurios, etc.

  • Siempre velarán porque ningún hermano se desvie de la regla de la orden.

  • Se prepararán en teología, apologética, patrología, etc. Esto con el fin de formar lo mejor que pueda el espíritu de la defensa de la fe.

  • Están prohibidas terminantemente todo tipo de alianzas con rotarios, clubes de leones y con alguna otra entidad satélite de la masonería.

  • Ningún miembro puede estar iniciado en ninguna organización gnóstica, ni masónica, ni rosacruciana, ni wiccana, etc.

  • De descubrirse un hermano en conección con alguna entidad masónica o parecida, se atendrá a la expulsión inmediata, retirados sus títulos, posición (si posee) y entregará su uniforme a la orden. Acto seguido se informará al párroco y al obispo de las acciones disciplinarias incurridas. 

  • Mostrarán siempre una actitud de respuesta rápida para emergencias, defensa, etc.

  • Ante los actos de violencia que están ocurriendo a nivel internacional contra la Santa Iglesia, donde haya un caballero o dama, se deberá hacer un monitoreo de toda la zona alrededor del templo minutos antes de cada misa. Identificarán cualquier movimiento, paquete o alguien sospechoso cerca de la facilidad.

 

  • En los momentos de la sagrada comunión se designarán caballeros o damas para que velen las entradas y las personas que comulgan, desde una distancia prudente, y velar que nadie robe y/o profane el cuerpo de Cristo.

 

  • Siempre se velará por la seguridad de los ministros y el o los sacerdotes y/u obispos en la santa misa.

Todas las reglas antes mencionadas siempre están sujetas a revisión para ampliar o para enmendar. No para eliminar.

bottom of page